Hay un proverbio árabe que dice que el guerrero no se rinde ante lo que le apasiona, encuentra el amor en lo que hace. Encontramos a una de esas guerreras que encuentra amor y fascinación por su trabajo.
Estuvimos hablando con Patricia Campos, directora técnica y conservadora del acuario Poema del Mar. Aquí les dejamos esta fabulosa entrevista y esperamos que les guste tanto como a nosotros.
¿Qué es poema del mar?
Poema del mar es un centro de conservación animal. Nuestro mayor interés y esfuerzo diario lo ponemos en el bienestar animal.
Aquí no hay un animal, de los casi 30.000 que viven aquí, que no lleve una supervisión y seguimiento diario.
Nos preocupa que todas las especies que tenemos vivan bien y eso implica un conocimiento integral de las mismas: su hábitat, su alimentación, su comportamiento sexual, las necesidades lumínicas, de temperatura o las condiciones del medio, para que puedan vivir bajo el cuidado humano.
¿Qué te aporta el conocimiento de las especies?
Este conocimiento nos permite posteriormente trasladarlo al medio natural. Te pongo un ejemplo: hace años no se hablaba del derecho a la vida de los animales y muchísimo menos existía concienciación sobre su cuidado; si aparecía un delfín o una tortuga varada no había preocupación por ellos. Hoy en día tenemos conocimiento para ayudar a los animales e incluso recuperarlos y muchas veces dar una segunda oportunidad de vida a animales, que por la mala actuación del ser humano, ya no podrán vivir más en su medio natural.
Los que trabajamos en Poema del mar, cuidando de los animales, estamos dispuestos a esforzarnos hasta el imposible.
Estuvimos 14 meses cerrados al público, pero en el equipo de biología no dejamos de trabajar ni un solo día. Todos los días durante el confinamiento veníamos a trabajar, seguíamos con el mismo control de calidad del agua, alimentación y rutinas de limpieza y por supuesto con las mismas preocupaciones, porque trabajar con animales es una preocupación constante ¿por qué no comió la rana? ¿cómo la podemos ayudar?
¿Cuántas especies conviven juntas en Poema del Mar?
En total unas 450 especies de agua dulce, salada y también animales terrestres como reptiles y anfibios.
Los peces son esos grandes desconocidos. Pero ¿un pez come, respira y ya?
Los peces, son animales que son felices sin depredadores, con agua, oxígeno y comida.
Cuando empiezas a aprender de ellos, te das cuenta que son unos animales fascinantes. Ya no sólo te hablo de temas de coloración, sino de formas y comportamiento. Hay muchos de ellos que son como mascotas, te reconocen cuando te asomas y saben cuándo vas a darles la comida.
Hay peces que son los que hacen las estaciones de limpieza, y les quitan los parásitos a otros más grandes. Entre ellos se conocen, y por eso los grandes no los depredan, porque saben que son de la estación de limpieza.
¿Qué te aporta tu trabajo a nivel personal?
Muchísimo, porque es una pasión. La calidad de vida de los animales, está directamente relacionada con el trabajo que hago y cada día aprendo algo de ellos.
Muchas veces es complicado entender su comportamiento desde la observación, pero me fascina intentar entender qué es lo que está ocurriendo.
Brigitte Bardot me dijo que en los ojos de un animal ella encontraba a Dios. ¿A ti qué te aportan los animales no humanos?
Cuando observo a los animales me encuentro con la vida y la capacidad que tiene la naturaleza de crear, las formas, los colores. Me emociona ver un pez cambiando de coloración para utilizarlo como método de defensa o caza.
Los animales cuestionan mi propia existencia. Son, junto a las plantas, la forma que tiene la naturaleza de expresarse.
¿Cómo es el día a día en Poema del mar?
Los días son muy intensos, son muchos animales, casi 30.000 para 27 personas que formamos el equipo de biología. A nosotros no nos mueve el dinero, estamos unidos por el amor a los animales y eso hace que cuando llega un animal nuevo a las 3 de la mañana, todos queremos verlo llegar, y todos queramos aclimatarlo.
Por una parte trabajar con animales es un regalo pero por otra, la preocupación del día a día lleva mucha responsabilidad.
El planeta sufre por el consumo irresponsable de los seres humanos ¿tenemos un problema de consumo?
Sí, enorme. Consumimos por aburrimiento. Todo está relacionado, somos grandes consumidores hasta de nosotros mismos. Vivimos en una sociedad materialista, donde solo queremos tener cosas y cosas, pero son esas cosas las que nos tienen a nosotros. La solución es sencilla, pero es individual: cada uno de nosotros debemos darnos cuenta de que no podemos violar los derechos de los animales.
Una entrevista de Ana Quintana