En 2018, el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife decidió afrontar el cambio en las infraestructuras de restauración de la Playa de Las Teresitas. Mediante concurso público fueron adjudicadas ocho nuevas instalaciones sujetas a estrictas medidas sanitarias y ambientales.
A finales de ese año, cuando ya estaban prácticamente a pleno rendimiento los nuevos kioskos, comenzamos a desarrollar el concepto de Flow Beach Club. Los primeros días de febrero de 2019, con el proyecto técnico finalizado, comenzamos las obras necesarias para iniciar la instalación de las infraestructuras. A mediados de marzo, el último kiosko que faltaba en Las Teresitas abrió sus puertas en período de prueba y con ensayos de cocina con una carta reducida.
Desde entonces, hemos ido creciendo cada vez más, convirtiéndonos ya en Instagram en el segundo kiosko con más followers (o flow-ers, como nos gusta llamarles a nosotros), a pesar de ser el último en aparecer en La Playa de Las Teresitas.